martes, 17 de marzo de 2015

Tiempo de promesas.

Según donde vivas, cada 3,4 años ciertas personas te prometen el cielo, la solución y se ve todo tan bonito que aunque te hayan engañado en el pasado sólo queremos seguir creyendo en las palabras bonitas de las personas que están mirando por nuestro futuro y su bolsillo.
Esto se llama tiempo de elecciones, unas de las cuales puedes acertar o puedes terminar arrepintiendote de haber echado la papelita en la urna, ya no hay vuelta atrás.
Mi máxima ilusión estás elecciones es que voy de vocal y me van a pagar 63 euros por estar sentada 8h y ver a la gente de mi pueblo como lleva a gente mayor que no se acuerda ni de donde está por el Alceimer a votar a el partido que le convenga. Una sociedad bastante rota y tapada más que con un velo, con un covertor y eso es lo que más quieren el velo.



































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